domingo, 2 de junio de 2013

Un ser social egoísta

Soy plenamente consciente de que cada cual mira su propio camino. A veces hay caminos que se cruzan, pero como en cualquier trayecto sólo dura un momento hasta que cada camino sigue su curso. Otras veces hay estaciones en los caminos, en ellas puedes pararte y encontrarte con otras personas que también se han detenido al igual que tú, sin embargo, llegará un momento en que todos tendréis que seguir vuestro camino. Hay caminos solitarios, sin paradas, y otros con muchos cruces.

Hay personas que creen recorrer su camino y no piensan que hay otros caminos alrededor, no necesitan nada más hasta que un día su camino se topa con un río. Ese camino no puede seguir y necesita de un puente.

La individualidad a veces hace que las personas de alrededor no se sientan, pero siempre antes o después, todos acabamos necesitando de los demás.

El hombre es un ser social. Pero sólo cuando le interesa, y el interés es tremendamente egoísta. Yo diría más bien que el hombre es plenamente egoísta. La mayor parte de la gente actúa teniendo en cuenta sus propios intereses y eso no es bueno, nada bueno.


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